Cambiamos de isla. El tráfico de pasajeros, coches y camiones, embarcando y desembarcando es incesante
A Santorini van y vienen miles
Nuestro Jet ferry se retrasa, y tenemos cuatro horas de viaje
Despues de un viaje horroroso, cabalgando sobre un potro salvaje, con una marejada de campeonato, con la mitad del pasaje y hasta las azafatas mareadas, llegamos a nuestro destino. Con escalas en Kufonisia, Amorgos y Santorini
Preciosa isla, un puerto pequeñito y nuestro apartamento con terraza y vistas a la playa y además enorme y precioso
Dicen que es una de las Islas más bonitas de las Cícladas y con muy poco turismo. Esta isla no tiene aeropuerto, sólo un pequeño puertito, para ferries pequeños
Un oasis de tranquilidad. Nos hospedamos en el hotel Aeolos Beach. Curiosamente mucho más barato en Air B&B que en Booking, 5 noches 590€
La recepcionista nos obsequia con un plato de pepino y dos copias del orujo local «tsipouro» que va directamente a la vena
Nos va a gustar mucho esta isla
Cenamos en una terraza en la playa, restaurante Akrogioli, con el agua mojandonos los pies. La cena nada del otro mundo, una fritada de pescado 42€, pero el sitio maravilloso
En el puerto hay atracados dos yates preciosos